Mi recompensa: ¡Mi plaza!

felicidad-o-placer

Allí estaba yo. Después de tantas horas de viaje, callejear la tarde anterior y agobiarme un poco por el calor primaveral madrileño, ya estaba plantada en la puerta lateral del Ministerio de Sanidad. En seguida nos juntamos los 350 médicos citados para esa sesión. ¡Cuánta gente! ¡Y de todas partes! Por suerte de cuando en cuando me encontraba con alguien conocido y así tenía con quién charlar. Qué bien, ¡así se espera mejor!

En ese momento estaba «relativamente» tranquila. Pero luego nos hicieron entrar en el edificio y empezaron a llamarnos por número de orden. Ahí sí que me empecé a agobiar: hacía mucho calor, había mucho ruido, empezaba a estar nerviosa por la elección… Al final llegó mi turno y pude enseñar el DNI, pasar el detector de metales y recibir la acreditación para entrar en el famoso salón de actos. ¡Al menos ahí dentro se estaba mejor!

Miraba a mi alrededor. Había de todo: gente muy entusiasmada y alguno muy nervioso que no paraba de mirar a una lista ya muy arrugada. Entonces estábamos todos en silencio, como en un trance. Se me hizo interminable la espera, pero al fin la funcionaria de la mesa comienza a darnos las instrucciones y, casi una hora después, empezamos con la asignación de plazas.

Tenía a un montón de personas por delante, así que con la calma. Me esperaba algo un poco más emocionante; echaba en falta algún aplauso o algo cada vez que alguien elegía plaza. Estábamos todos como muy concentrados, no se oía a nadie hablar. Yo estaba en mi mundo, como viendo qué escogían las personas de mi turno pero sin asimilarlo bien. De cuando en cuando escuchaba un nombre conocido que escogía su plaza: ¡qué bien! ¡Buena elección! Otras veces la funcionaria decía la especialidad que quería hacer y me daba un vuelco al corazón. ¿Toca tachar ya algo o todavía no toca? Ah, no, que cogió en otro sitio. Pero el temido momento llegó: adiós segunda opción, ¡no pudo ser! Así que o era mi primera opción o la tercera, además de otras muchas en las que quedaban todavía plazas sueltas. De cualquier forma, mi lista iba menguándose y empezaba a pensar que si no tendría que haber visitado más hospitales. Durante un largo rato nadie volvió a escoger mi especialidad, pero pasados unos cuantos números de orden volvía a escuchar el nombre de mi especialidad, sólo que eran plazas de otras ciudades. ¡Uf, alivio! Y, en resumen, así ha sido la elección: esa montaña rusa emocional en bucle durante muuuuuuuucho tiempo.

Hasta que nos llaman a mí y a otras 10 personas para bajar a la mesa. Entonces me despierto de mis ensoñaciones y asimilo que me toca ya. ¡Eh, pues ya es muy probable que me toque mi primera opción! Va pasando un compañero, otro, otro, otro… Hasta que me da por echar cuentas. Espera… ¡Ya está! ¡Ya es mía! ¡Hay menos aspirantes por delante de mí que número de plazas disponibles para lo que quiero! ¡¡¡¡¡Síiiiiii!!!!!

Finalmente me acerco a la mesa. Intento no trabarme ni hacer el ridículo (¡qué nervios!) y le digo al funcionario lo que quiero. Compruebo que está bien… ¡¡¡¡ENTER!!!!

Oftalmología

¡¡¡¡Síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!!

Pero, espera, ¿no me tienen que dar una acreditación? Ah, que es al final del pasillo. Supongo que lo habrán explicado al principio, pero estaba tan en mi mundo que o no me di cuenta o no me acordaba ya XD .

Luego salí… Y vi a mi familia, a algún amigo, gente a mi alrededor celebrándolo… Me sorprendió muchísimo. Fue como cuando salí de hacer el examen MIR aquel 28 de enero y. de repente, vi a toda aquella gente animándonos, con pancartas… Empiezo a tener un subidón, me lloran los ojos… Lo he logrado.

Muchísima suerte a todos los que os toca coger plaza. Es un momento inolvidable, precioso… Uno lo pasa algo mal dentro del salón de actos, pero merece la pena.

11 comentarios

  1. Enhorabuena!, me alegro mucho por ti!. Lo que cuentas se convierte en una emoción contagiosa que nos da envidia sana a los que esperamos llegar allí dentro de un año. Espero que seas feliz en tu profesión y ayudes a muchos…
    Por cierto, se comenta que será el último año de elección presencial de plaza, habéis oído algo?. Sería una pena, perderse ese momento y vivirlo como tu lo has vivido. Ojalá sean sólo rumores…
    Un abrazo!

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    1. Muchas gracias! Pues, si te digo la verdad, yo también he oído rumores, pero no sé hasta qué punto será posible. En mi turno hubo varios chicos que hicieron la petición telemática, pero todos fueron allí en persona por si las moscas. No creo que sea aplicable al MIR porque hay un montón de plazas y posibilidades y siempre es bueno estar allí por lo que pudiera pasar.

      El año que viene te tocará vivirlo… Y nos contarás jeje.

      Mucho ánimo!

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      1. Muchas gracias, y disfruta mucho de todo lo que está comenzando en tu vida. No te olvides de nosotros… Un gran abrazo.

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  2. Enhorabuena! Hace tiempo que te sigo y estoy feliz por ti. Yo haré el MIR el próximo año. Estos días estoy nerviosa, la especialidad que siempre he querido se agota muy rápido por lo que no sé si podrá ser. Disfruta mucho de la especialidad y no te olvides de ir contándonos.

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  3. FELICIDAAAAAAAAAADES….felicidaaaaades 🙂 yo escogo el 26…soy recirculante…a ver q tal…aunque ya lo pase..siempre hay algo de nervios. No te olvides presentar los antecedentes en tu hospi.

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    1. Muchíiiiiiiisimo ánimo Susana! Desde aquí te deseo toda la suerte del mundo!

      Yo creo que si tuviese que volver a elegir especialidad seguría igual de nerviosa o más aún en el auditorio del ministerio jejejeje.

      Un abrazo.

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  4. muchísimas felicidadeeess!! ahora a darlo todo 🙂
    gracias por los consejos que has ido dando durante y después de tu preparación, la verdad es que se agradecen para los que nos tenemos que presentar el próx año
    gran trabajo, gracias por compartir la experiencia:)

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      1. Soy Isabel, madre de una Remir, este año sí ha podido ser, tras una decisión meditada mi hija decidió repetir , y lo ha conseguido. Los padres y amigos que estamos esperándoos en la puerta del M inisterio también sentimos una emoción muy fuerte, una experiencia que siempre llevaré conmigo. Las lágrimas de todos ante la salida de los primeros aspirantes con sus sonrisas preciosas por haber conseguido su sueño. SOIS MARAVILLOSOS. Un beso fuerte , enhorabuena a todos los que habéis conseguido vuestro objetivo y mucho ánimo a quienes estáis estudiando , que el año que viene es el vuestro. UN ABRAZO y muchas gracias por este precioso blog. Isabel.

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  5. Me alegra muchísimo que este haya sido el año!!! Muchas felicidades para tu hijo y para la familia por haber aguantado la presión de dos preparaciones MIR como unos campeones. Enhorabuena, ahora a trabajar mucho!

    Me ha encantado tu comentario 🙂

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